La concentración de gases de efecto invernadero en la atmósfera alcanza récords históricos

La Voz

BIODIVERSA GALICIA

El año pasado, el incremento de CO2 en la atmósfera fue de un 0,56 %, lo que significa que la presencia de este gas no solo mantiene su crecimiento sino que acelera el ritmo

26 nov 2019 . Actualizado a las 14:07 h.

Cuando solo falta una semana para que el mundo se examine en la Cumbre del Clima de Madrid sobre su grado de compromiso en la lucha por frenar el cambio climático, los datos objetivos apuntan a que, a día de hoy, los incumplimientos en la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero son generalizados y que el calentamiento global sigue con su avance acelerado.

La concentración media mundial de dióxido de carbono (CO2), el principal gas causante del efecto invernadero, no solo no se redujo en el 2018, sino que, con 407,8 partes por millón, pulverizó todos los récord históricos existentes, según el informe anual emitido por la Organización Meteorológica Mundial (OMM). El incremento anual de la concentración de CO2 en la atmósfera fue de un 0,56 %, lo que significa que la presencia de este gas no solo mantiene su crecimiento sino que acelera el ritmo, ya que se trata de una subida superior a la media de la última década.

La concentración actual de dióxido de carbono, generada fundamentalmente por la quema de combustibles fósiles -carbón, petróleo y gas-, es una vez y media superior a la que había a mediados del siglo XVIII, en la época preindustrial. Lo peor, pese a todo, no son las actuales y altísimas concentraciones sino que el informe de la OMM advierte que, salvo que se produzca un recorte urgente y drástico de las emisiones, la presencia de CO2 en la atmósfera no dejará de crecer a lo largo de la próxima década, sin que nada indique cuándo podría alcanzar su techo, lo que tiraría por tierra todos los compromisos de reducción para 2030 alcanzados en el Acuerdo del París de 2015 y la posibilidad de frenar los efectos más desastrosos del cambio climático.