María Bazar, del podio nacional de panadería al templo Culler de Pau

Patricia Blanco
PATRICIA BLANCO CARBALLO / LA VOZ

PONTECESO

Gentes del Finis Terrae | La pontecesana, que estudia Dirección de Cociña, logró una medalla de oro en las Spainskills. Hoy mismo inicia prácticas en el restaurante de Javi Olleros

17 abr 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

María Bazar Verdes (Tella, Ponteceso, 2003) iniciará hoy mismo sus prácticas en el templo gastronómico Culler de Pau, en O Grove. «Javi Olleros é un referente, sempre foi un sitio que me gustou, e do que querería formar parte unha tempada», explica. Poder hacerlo la tiene «contenta e con ganas». Con estas prácticas, María completará el ciclo superior de Dirección de Cociña que ha estudiado en el CIFP Paseo das Pontes de A Coruña, centro para cuyo profesorado tiene muy buenas palabras: «Son uns profesionais, é un pracer aprender deles». No obstante, no es esta formación la que ha convertido a esta joven de 20 años —21 en agosto— en blanco de felicitaciones, sino su participación en las Spainskills 2024, las olimpiadas nacionales de formación profesional celebradas en Madrid la pasada semana y de las que se ha traído una medalla de oro en la rama de panadería. Ya había logrado también el oro en las olimpiadas gallegas.

«Aínda non mo creo ao 100 %. Son horas de traballo e sempre tes unha mínima esperanza, pero con gañar non contas. Había xente con moitísimo nivel, de toda España...», contaba este lunes a mediodía, aún en Madrid. En el Paseo das Pontes imparten ciclo de Panadería y un curso de especialización en esta disciplina, pero María no estudia ni lo uno ni lo otro, lo que aún da más valor a su gesta: hace menos de un año que se internó en esta materia. «Propuxéronme o campionato na rama de panadaría e, para aprender un pouco nun sector distinto, pois aceptei. Empecei a adestrar polas tardes, a formarme para o campionato galego e, despois, ao obter o ouro, para o nacional», explica.

Ha descubierto todo un mundo: «Nunca tivera pensado dedicarme á panadaría, pero gústame. Os do pan son ingredientes básicos, pero todo o que hai detrás é complexo, as fermentacións....». Le gusta hacerlo y, reconoce, también comerlo: «Encántame, non concibo unha comida sen pan».

Una vez que acabe sus prácticas en Culler de Pau, allá por junio, María regresará A Coruña para seguir internándose en el mundo panadeiro, en tanto que en septiembre se tendrá que enfrentar a las European Skills, las olimpiadas europeas: serán en Lyon, Francia.

Pan e inteligencia artificial

En las pruebas nacionales les pidieron varios tipos de productos, de panadería y pastelería. Distintos formatos de pan con harinas distintas, bollería hojaldrada, enriquecida con huevo y mantequilla... Curioso, sin duda, el ejercicio del último día. Tenían que entregar una pieza artística elaborada con masa de trigo y centeno para la que podían usar colorantes y que debía representar la inteligencia artificial (IA). Asegura la pontecesana que la dificultad venía por los tiempos, así que alude a la organización como algo clave. Lo que salió de su cabeza fue una bola del mundo a la que añadió elementos sobre tecnología e IA, «un pouco para representar como está cambiando todo en función disto, as formas de traballar, a sociedade, a cultura...». Semeja complejo en su concepción, «pero son técnicas a ir collendo», reflexiona Verdes.

Un cambio de formación

En Ponteceso, María estudió primero en el colegio Eduardo Pondal y después en el instituto, con bachillerato de Ciencias Sociais. Sintió la habitual presión de cursar una carrera y se anotó a un grado bilingüe de Administración e Dirección de Empresas, en la Universidade da Coruña, «pero non cheguei a rematar o primeiro ano». No le acababa de convencer: «A min, o que sempre me gustou foi a cociña». Agradece el apoyo de sus padres cuando les contó lo que sentía: «Animáronme a facer algo que eu quixese de verdade, ao final é onde vas pasar a vida», sopesa la joven, que tiene una hermana pequeña, Lara.

Sin ascendencia hostelera, «só uns avós que tiveron un bar, pero que non era restaurante», a largo plazo sí se ve con un negocio propio, «que combinase a cociña coa importancia do pan, que non está suficientemente valorado». Tiene clarísimo que sería en la Costa da Morte, «á que a veces tampouco lle damos a importancia que ten». Como al pan. No obstante, en lo inmediato, su intención pasa por «seguir aprendendo dos profesionais que temos en España e no mundo» y, quizás, por un curso de especialización en panadería.

En su entorno más cercano, María cita ejemplos de restauración que le gustan, como el Mar de Ardora de Cabana o el Hotel Balarés, en Ponteceso: «É súper interesante, a conciencia co entorno, non tiven ocasión de pasar moito, pero paréceme impecable». En su Tella natal está O Fontán. En A Coruña la conquistó Terreo. «A verdade é que en Galicia temos un produto moi bo», enfatiza la María de Dirección de Cociña. Le gusta más trabajar el pescado que la carne, pero se interna en todo. ¡Hasta en el pan!

PARA SABER MÁS...

De las Olimpiadas Nacionales de FP, las Spainskills 2024, se vinieron dos medallas para la Costa da Morte. Una es esta de oro que logró María Bazar, y la otra es la de plata que mereció la dumbriesa Melisa Touriñán en servicio de restaurante y bar. Puedes saber más de ella en este reportaje