Un hombre con una escopeta de juguete causa alarma en la ronda de Nelle de A Coruña

C. Devesa A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA

Momento en el que una vecina captó a un hombre que se paseó por la ronda de Nelle con una escopeta de juguete
Momento en el que una vecina captó a un hombre que se paseó por la ronda de Nelle con una escopeta de juguete

Una vecina dio la voz de alerta a la Policía Local señalando que el varón portaba un arma de balines y que podría ser uno de los okupas del conflictivo edificio del número 120

25 abr 2024 . Actualizado a las 16:19 h.

Los vecinos de la ronda de Nelle de  A Coruña se llevaron un buen susto en la mañana de este jueves cuando varios agentes de la Policía Nacional y de la Local se personaron en el edificio del 120, okupado en su totalidad. El despliegue policial en la zona correspondió a una llamada de una residente en la zona tras divisar a un hombre que caminaba por la calle con una escopeta de balines. La mujer indicó que el individuo podría ser uno de los habitantes del inmueble.

El varón, que iba acompañado de otro, se paseó por la vía con el arma sujeta y en posición de disparo, lo que asustó a todos los que se cruzaron con él. Tras ser notificados, varios agentes del cuerpo de la Policía Local y Nacional acudieron a la zona y estuvieron un rato en el portal del inmueble situado en el número 120, punto habitual de conflicto en el barrio y en donde en varias ocasiones detuvieron a personas investigadas por diferentes delitos. Una de las últimas intervenciones en el lugar fue para arrestar a un sospechoso de agresión sexual.

Desde la Policía Local indican que el individuo que se paseó con la escopeta era de origen asiático, según apuntaron los vecinos, y que en la construcción okupada no consta que resida ningún ciudadano que corresponda con esa descripción. Después de buscar por la zona y de hablar con comerciantes y residentes, los agentes no localizaron al varón. Posteriormente, desde la Nacional explicaron que se trataba de un chico que iba jugando con un arma de juguete por la calle junto a un familiar.

Los vecinos del área llevan años alertando de la creciente inseguridad y de los problemas derivados de la okupación de ese edificio, sobre el que no pesa ninguna denuncia de allanamiento. El dueño de la construcción falleció y sus hijos heredaron la finca. Sobre ellos pesan varios requerimientos del Ayuntamiento por no mantener las condiciones de salubridad en el inmueble. De hecho, el gobierno local intervino el pasado año para limpiar el patio común de donde retiraron más de diez toneladas de basura.