Juan Suárez, coordinador del SEM de Oleiros: «En un servicio como este, todos los inviernos son duros»

Tamara Rivas Núñez
T. Rivas A CORUÑA

OLEIROS

ANGEL MANSO

Cree que las sanciones ante actuaciones imprudentes son útiles, pero considera vital la información previa

08 mar 2024 . Actualizado a las 14:53 h.

Lleva toda su vida laboral dedicada al servicio de los demás. Primero como socorrista, después como Policía Local y actualmente y desde que se creó el equipo, como coordinador del Servizo de Emerxencias Municipal (SEM) de Oleiros. A sus 51 años, Juan Suárez (A Coruña, 1972) ha perdido la cuenta de las intervenciones y temporales que lleva a sus espaldas, pero ante cualquier nueva alerta, dirige las intervenciones del operativo con la misma diligencia y templanza.

—¿Cómo está siendo el invierno para el SEM?

—Pues va un poco como el tiempo que estamos teniendo, algo irregular. Cuando hay avisos meteorológicos tenemos bastantes intervenciones, sobre todo las vinculadas al viento.

—¿Cuáles son las más frecuentes?

—Tendidos telefónicos y eléctricos, elementos que se desprenden de tejados o fachadas…, pero sobre todo son llamadas por ramas o árboles caídos. Aquí en Oleiros las zonas urbanas están integradas en la naturaleza. Hay árboles por todas partes, en jardines, parques, casas… no solo en los montes. Con tanto árbol, la probabilidad de que pase algo es mayor.

—¿Cómo se preparan ante la llegada de un temporal?

—Por guardia y de manera permanente hay dos agentes de emergencia y algunos días tres. Dependiendo de la gravedad del temporal, el equipo se refuerza, mínimo con otras dos personas, para poder actuar en dos intervenciones al mismo tiempo si se da el caso. Somos un servicio permanente. Estamos 24 horas al día los 365 días del año. Nuestra intervención es continua, sin parones, y nuestra respuesta es inmediata.

—Ante una situación meteorológica adversa será frecuente recibir varias llamadas a la vez. ¿Cómo proceden en ese caso?

—Los ciudadanos pueden llamarnos personalmente, pero la mayor parte de las llamadas las recibimos a través del 112. Ellos son los que activan el protocolo de avisos y, normalmente informan primero a la Policía Local para que hagan una primera comprobación para saber si es necesaria nuestra actuación. Si es así, nos indican el índice de gravedad y según eso, se priorizan unas intervenciones frente a otras. Eso nos permite no ir a ciegas.

—Seguimos viendo comportamientos imprudentes cuando hay alertas activadas, ya sea en el mar o en tierra.

—No son muchas, pero las hay. En el último temporal tuvimos que avisar en la zona de Mera a dos personas que estaban haciendo fotos en el espigón. La zona estaba balizada y el mar les estaba prácticamente golpeando, pero allí seguían. Por fortuna, son comportamientos puntuales, no es habitual. Quienes lo hacen es porque no son conscientes del peligro que entraña para ellos y para las personas que se puedan ver obligadas a intervenir.

—¿Habría que sancionar más?

—Sancionar funciona, pero la información previa es vital. No precintamos las zonas porque sí. Hacemos comprobaciones previas y, dependiendo del comportamiento, es cuando se decide si balizar o no. Por eso a veces, con alertar en el mar, puede que en Mera esté cerrada la playa y en Santa Cruz no.

—¿Tiene marcada alguna intervención o temporal en todos estos años?

—Llega un momento en el que, con el estrés laboral que tenemos, simplemente resolvemos la intervención y pasamos a la siguiente. En un servicio como este, todos los inviernos son duros.

—¿Cómo podría mejorar el SEM de Oleiros?

—Necesitamos que haya una mayor coordinación con el consorcio provincial de bomberos, que a nivel autonómico tengan en cuenta a todos los servicios que hay en el mapa. Parece que cada vez se nos va teniendo más en cuenta. Con mejor organización es posible llegar a más intervenciones y hacerlo de una manera más operativa.