El número de funcionarios se dispara en más de medio millón desde que Sánchez llegó a La Moncloa

l. Palacios MADRID / COLPISA

ECONOMÍA

CARLOS CORTÉS

El empleo público bate todos los récords al rozar los tres millones de trabajadores y crece a un ritmo que duplica al de la afiliación general

29 ene 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

El Gobierno de Pedro Sánchez se ha convertido en una máquina de crear empleo público: el número de funcionarios se ha disparado en más de medio millón en poco más de 5 años. Este colectivo, formado por policías, sanitarios, profesores o administrativos, pero también ministros, altos cargos y asesores del Ejecutivo, se convirtió en uno de los grandes motores de la recuperación tras la debacle que provocó la pandemia. Se necesitaban más que nunca médicos, enfermeras y psicólogos para combatir el virus, pero también profesores para unas clases más fragmentadas y administrativos para gestionar todas las prestaciones y ayudas que hubo que poner en marcha.

La crisis sanitaria ha pasado, pero, aún así, el empleo público sigue teniendo un peso muy importante en el crecimiento del mercado laboral español. De los más de 1,8 millones de nuevos afiliados medios que se han dado de alta en los últimos 5 años y medio, casi 520.000 se concentran en la Administración; más de uno de cada 4 nuevos puestos, según datos extraídos del Ministerio de Seguridad Social. Cuando Sánchez llegó a La Moncloa, en junio del 2018, había en España algo más de 2,4 millones de funcionarios. Ahora su número se ha disparado en más de un 21 % hasta rozar por primera vez en la historia los 3 millones. Nunca antes se había visto un ritmo de creación de empleo público tan espectacular, que duplica el 9,6 % que ha avanzado la afiliación con carácter general en este período.

Las sucesivas ofertas récord de empleo público están detrás de este fuerte aumento. El ejercicio pasado se convocaron cerca de 40.000 plazas y, desde que Sánchez se convirtió en presidente, se han lanzado más de 180.000, aunque una cantidad importante no son nuevos puestos sino que están destinados a la estabilización de empleos para reducir el abuso de interinos.

Fin a los recortes

En cualquier caso, se trata de una cifra histórica, que triplica los 63.400 puestos que aprobó el Gobierno de Mariano Rajoy. Con la llegada de Sánchez se puso fin a los años de recortes de empleo en la Administración Pública, rebajas que comenzaron con José Luis Rodríguez Zapatero y que siguieron con Rajoy para combatir la crisis de la burbuja inmobiliaria, cuando se frenó en seco la renovación de los puestos vacantes y se impuso una tasa de reposición cero. Ahora esa por fin se crea empleo neto gracias a una tasa de reposición del 120 % en los sectores prioritarios y del 110 % en el resto.

Pero para los sindicatos no es solución y exigen que se elimine totalmente la tasa de reposición para renovar unas plantillas que siguen siendo insuficientes y están muy envejecidas. Así, la Administración General del Estado tiene 2.400 trabajadores menos que en el año 2010 y, además, sufre otro grave problema: el 60 % de la plantilla se jubilará en los próximos ocho años, por lo que urge una renovación exprés. «Tenemos una carencia en el empleo público estructural», sostiene Francisco Lama, secretario de Acción Sindical de CSIF, que asegura que «no queremos ni un empleado público más ni uno menos de los necesarios».

Porque España, pese al récord, aún sigue estando muy por debajo de la media del nivel de funcionarios de la OCDE y muy lejos de las cifras de Francia y ya no digamos de Noruega, Suecia o Dinamarca.