Reservorios virales y alteraciones de la inmunidad: ¿posible origen del covid persistente?
OPINIÓN
En la actualidad, la comunidad científica trata de desvelar los mecanismos asociados al origen y desarrollo del síndrome de covid persistente o long covid, el cual está asociado a más de 200 síntomas diferentes. Los estudios apuntan a un origen multifactorial del trastorno, e incluso a la posibilidad de que se trate de varios síndromes diferentes con distintos orígenes. Dos son las hipótesis con mayor potencial sobre su causa u origen.
En primer lugar, los reservorios virales desarrollados por déficit inmunitario de la persona infectada por el SARS-CoV-2. Diversos trabajos observan la presencia de reservorios del virus sobre todo a nivel endotelial. De hecho, el endotelio es una de las dianas de las variantes de SARS-CoV-2 anteriores a ómicron. En el mes de agosto de este año comenzó un interesante estudio con 30 pacientes diagnosticados de covid persistente donde se analizará la eficacia del anticuerpo monoclonal AER002, anticuerpo sintético diseñado a partir de las variantes previas a ómicron, con la idea de confirmar si los pacientes podrían presentar reservorios de virus previos a esa variante. Los resultados que confirmen si dicha estrategia es válida o no estarán en el año 2025.
Como segunda hipótesis, destacar el desarrollo de alteraciones inmunológicas y respuesta autoinmune frente a la infección por SARS-CoV-2. Recientemente, un trabajo publicado en la revista Nature asoció la presencia de diferencias hormonales e inmunitarias en pacientes con covid persistente. Se observa el mantenimiento de la activación de los linfocitos T de entre 18 a 24 meses, aunque la infección no esté mostrando síntomas. Además, enfermedades como artritis reumatoide, diabetes y otras asociadas a alteraciones autoinmunes han sido vinculadas a la infección por SARS-CoV-2. Sin embargo, se requieren más estudios en este sentido.
Finalmente, en lo que se refiere a las reinfecciones por SARS-CoV-2, cuando un paciente tiene covid persistente y se vuelve a contagiar podría sufrir un empeoramiento de su covid persistente.
Por todo ello, una de las principales medidas que podría reducir el riesgo de desarrollo o empeoramiento del covid persistente sería la actualización de las vacunas del covid 19 a las subvariantes circulantes, así como el desarrollo de investigación e innovación en las líneas de origen del síndrome anteriormente mencionadas.
Enlaces de interés:
https://classic.clinicaltrials.gov/ct2/show/NCT05877508
https://www.nature.com/articles/s41586-023-06651-y