Casi un centenar de kilómetros para pescar truchas en Santiago y su área

Natalia Rodríguez Noguerol
natalia noguerol MELIDE / LA VOZ

SANTIAGO

Sandra Alonso

Las licencias para la inminente temporada suman más de 4.400 en la zona

10 mar 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

Todo está listo para el inicio, el próximo domingo, de la temporada de pesca en los ríos gallegos: la normativa de la Consellería de Medio Ambiente que regula la práctica del deporte en la comunidad está publicada; los cauces fluviales, a rebosar de agua; y los pescadores, con muchas ganas, después de más de siete meses —cuando concluyó la pasada campaña— con la caña a buen recaudo. Y hay afición. Los veintisiete concellos distribuidos en las comarcas de Santiago, Ordes, Arzúa, Melide, O Sar y A Barcala se reparten 4.421 licencias de pesca, de acuerdo con los datos facilitados por la Consellería de Medio Ambiente. Los vecinos con el correspondiente carné disponen en todo ese territorio de muchas opciones para pescar hasta el 31 de julio, que será cuando finalice la temporada. De hoy en una semana, una decena de cotos de pesca estarán disponibles en Santiago y su área de influencia para la captura de truchas. Suman noventa y cinco kilómetros en los cauces fluviales del territorio.

El más extenso es el del río Xallas, de 9,9 kilómetros, en Santa Comba, donde también hay 2 kilómetros acotados para pescar en el río Abuín. Le sigue en extensión, el tramo de 9,2 kilómetros autorizado para practicar el deporte en las aguas del río Iso, en Arzúa. Y de 9 kilómetros es el coto de A Ponte Maceira, en el río Tambre, a su paso por Ames, Negreira y A Baña, que tiene, además, la peculiaridad de ser el único de la provincia autorizado para la pesca intensiva. Significa eso que el número máximo de permisos para pescar es de 75 los días en los que está permitido practicar el deporte, frente a los 6 establecidos para la mayoría de los restantes cotos de pesca. La excepcional obedece a que el río Tambre en el coto de A Ponte Maceira se nutre también de la suelta de truchas de piscifactoría.

Nuevo tramo en Furelos

Lo explica Xabier Pazo. Es presidente de la asociación de pescadores que en Melide adopta el nombre del coto de pesca de la comarca: el del río Furelos. Son 8,3 kilómetros que se extienden por Toques y por la capital comarcal, y a los que para la inminente temporada de pesca se suman 8 kilómetros de cauce fluvial que, ya por Santiso, desembocan en el río Ulla. Medio Ambiente los vedó en 2019 tras un vertido desde el polígono industrial de A Madanela que causó la mortandad de más de 10.000 truchas.

Por otro lado, el río Tambre también deja el identificado como coto de pesca de Sigüeiro, con 8,4 kilómetros en O Pino, Oroso y Santiago, y un tramo de 2,4 kilómetros que discurren por el municipio capitalino y por el metropolitano. Asimismo, hay espacio reservado para pescar en Santiago y Trazo, con 7,9 kilómetros en el identificado como coto de pesca de Chaián, y 8,5 kilómetros, también para la captura de truchas, en el coto de Ponte Castro, que comparte Boimorto con Vilasantar y Mesía.

Los pescadores de las comarcas de A Barcala y O Sar tampoco tienen que alejarse de casa para ir a pescar. El coto de Negreira dispone de un tramo acotado de 8,3 kilómetros en el río Barcala, y uno de 0,9 kilómetros en el cauce fluvial de Albariña. El coto de Rois está distribuido en tres tramos de 5,5 kilómetros, 1 y 3,2 kilómetros en los ríos Rois, Baleirón o Liñares, y en el regato de Buxán. Y en la capital comarcal, Padrón, hay dos tramos del río Sar acotados para pescar, pero el de 4,2 kilómetros que comparte con Rois es para la captura de reo —la temporada, en este caso, no empieza hasta mayo— y el tramo de 2,5 kilómetros de río a su paso también por Dodro están reservados para la pesca sin muerte. Esta modalidad de captura y suelta es obligatoria en la totalidad de los cotos el jueves, salvo que se día festivo, y en el coto de Rois se amplía a los martes. Además, los lunes está prohibido pescar en cualquiera de los cotos.

Recursos en el Ulla

A la vuelta de la esquina, los aficionados a la pesca de Santiago y su área de influencia también disponen de diferentes cotos en el río Ulla, con tramos para la captura de truchas en Touro y Boqueixón. Además, en el cauce fluvial asociado a la provincia de Pontevedra hay tramos para la pesca sin muerte en Teo, Vedra y Padrón.

Sin permisos hasta junio en los cotos de Melide y de Santa Comba  

Las expectativas para la temporada de pesca que da comienzo el próximo domingo son buenas entre los aficionados a este deporte fluvial tan arraigado. El presidente de la Asociación de Troiteiros Río Furelos, Xabier Pazo, recuerda que la lluvia favorece el caudal de los ríos, que es, como dice, «abundante». Es esa razón de peso más que suficiente para indicar que «a tempada, a priori, preséntase boa. Despois —añade—xa se verá». De la pericia, y de la suerte también, del pescador dependerá si las truchas pican o no, pero, de entrada, «de novembro a febreiro, criaron ben», indica Pazo.

Habla, sobre todo, del río que más conoce: el Furelos, donde el colectivo que preside ya realizó los trabajos de puesta a punto del coto de pesca, con la renovación de las correspondiente señales, la limpieza de los accesos y la reparación de las pasarelas de madera existentes para cruzarlo. Sea por esas tareas de mantenimiento, porque el cauce fluvial de Melide, Toques y Santiso es un «río troiteiro», o por ambas circunstancias, pero los permisos para pescar en él no solo se agotaron para el primer día de pesca. Se vendieron para todo el mes de marzo y para abril, tal y como comprueba Xabier Pazo en la web temática habilitada por la Consellería de Medio Ambiente. Tampoco quedan permisos para pescar hasta junio en el coto de Santa Comba. Y en ninguno de los restantes, para capturar truchas el primer día de la temporada. Los cotos con menos demanda son en los que solo está permitida la pesca sin muerte.