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La Xunta pide al Estado que autorice por primera vez en Galicia la destilación del vino sobrante en una denominación de origen

Luis Díaz
luis diaz MONFORTE / LA VOZ

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Ribeira Sacra se resiente de los problemas en la comercialización de tintos
Ribeira Sacra se resiente de los problemas en la comercialización de tintos ALBERTO LÓPEZ

El director del Ingacal sugiere que es la mejor solución para los excedentes acumulados en las bodegas de Ribeira Sacra

08 may 2024 . Actualizado a las 09:29 h.

La Consellería de Medio Rural se dirigirá al Ministerio de Agricultura para que autorice la destilación de crisis con el fin de regularizar excedentes de vino que no encuentran salida en el mercado. El director de la Axencia Galega de Calidade Alimentaria (Agacal), José Luis Cabarcos, dio a conocer la iniciativa en la comisión de Agricultura del Parlamento de Galicia en respuesta a una pregunta sobre esta cuestión. Cabarcos se refirió de forma explícita a la fórmula de la destilación como una forma de «xestionar adecuadamente» el volumen de vino que acumulan las bodegas en la denominación de origen Ribeira Sacra.

El recurso a la destilación de crisis no tiene precedentes en el sector del vino en Galicia. El director del Ingacal manifestó su confianza en que la comunidad gallega «reciba o mesmo trato que outras» en las que se autorizó esta medida de carácter excepcional. Cabarcos dijo que hasta la fecha el Gobierno puso de manifiesto su «falta de sensibilidade» para autorizar esta fórmula en Galicia y que incluso se pusieron trabas a las gestiones realizadas por la Xunta para conseguirlo.

La destilación de crisis es una medida excepcional que debe ser tramitada a través del Estado y autorizada por Bruselas. Los importes de las compensaciones que reciben las bodegas cuando se autoriza su aplicación se fijan con arreglo a las condiciones establecidas en el reglamento comunitario. El alcohol resultante se utiliza exclusivamente para fines industriales —incluidos los de desinfección o farmacéuticos— o energéticos, para evitar que esta medida afecte a la ley de competencia en lo relativo a la comercialización de bebidas alcohólicas.

A través de su nuevo presidente, Antonio Lombardía, Ribeira Sacra mantuvo conversaciones con la Consellería de Medio Rural para conseguir la autorización de una destilación de crisis para sus excedentes de vino tinto. El anuncio del director del Ingacal se produjo coincidiendo con la celebración de una rueda de prensa en Monforte en la que responsables de Unións Agrarias exigieron medidas a la Xunta para que «as uvas non queden colgando nas viñas» en la próxima vendimia. Según el sindicato, las cosechas abundantes de los últimos años y la caída de las ventas de vinos tintos han propiciado una «tormenta perfecta» en esta denominación de origen.

Alrededor de un 80 % de la producción de vino en la Ribeira Sacra es de tinto y la mencía acapara la mayor parte de la uva vendimiada. En los últimos meses se está llevando cabo un importante proceso de reconversión para sustituir por godello vides de esta última variedad. Algunas bodegas incluso supeditan la compra de uva en la próxima vendimia a que sus proveedores les suministren paulatinamente una mayor cantidad de uva blanca. La godello se está pagando a dos euros o más, mientras que el precio medio de la mencía está en algo más de un euro.

Cabarcos aseguró en la comisión de Agricultura del Parlamento que la destilación de crisis iría acompañada, de llevarse a la práctica, de una mejora de las medidas de apoyo al sector por parte de la Xunta y de la creación de nuevas líneas en caso preciso. En Ribeira Sacra, y según fuentes del consejo regulador, es una solución que cuenta con el respaldo de la mayoría de las bodegas.

Durante el pasado año varios estados miembros solicitaron a la Comisión Europea una intervención para ayudar a superar la problemática de los excedentes de vino. Se puso entonces sobre la mesa la destilación de crisis, que fue financiada con cargo a los programas nacionales de apoyo al vino. En España dos comunidades se acogieron a esta iniciativa: Cataluña, que destinó 699.563 euros para destilar 24.984 hectolitros; y Extremadura, con un presupuesto de 820.986 euros para destilar 27.713 hectolitros. También La Rioja y el País Vasco recurrieron a esta medida destilando 171.000 y 25.000 hectolitros, respectivamente.