De cantar con Izal a dar voz gallega al «indie»

Begoña Rodríguez Sotelino
begoña r. sotelino VIGO / LA VOZ

VIGO

cedida

La viguesa Aroa Ferreiro lidera la banda Norde, que decidieron llamar así por una obra del escritor Álvaro Cunqueiro. El grupo acaba de editar su primera canción, en la que hablan de la salud mental

09 dic 2021 . Actualizado a las 00:11 h.

Aroa Ferreiro (Vigo, 2002) empezó a tocar la guitarra a los 10 años. Después se sumó su propia voz y un poco más tarde comenzó con el piano. Con su amiga María Ferreirós montó su primera formación musical, el dúo Alana, con el que tocaban en bares, en eventos y a veces por la calle, haciendo versiones de Xoel López, Zahara, Vetusta Morla o Iván Ferreiro, con el que comparte apellido y una proyección de futuro que el ex de Los Piratas tuvo a la edad de la prometedora viguesa. «Me encanta lo que hace, pero no somos familia, aunque mi padre fue a clase con él», cuenta.

El nombre de Aroa destacó por primera vez en los medios nacionales cuando fue una de las elegidas para cantar con el grupo Izal, que quiso celebrar el aniversario de su disco Autoterapia invitando a sus seguidores a participar a través de una convocatoria que lanzaron en redes. De aquel casting online salieron elegidas cuatro propuestas, entre ellas la de la viguesa con su versión de Pausa.

Hasta entonces la vida transcurría por su cauce habitual. Estaba estudiando 2º de bachillerato en el IES Alexandre Bóveda y celebrando haber disfrutado de aquella experiencia que tuvo lugar en los estudios Blind Records de Barcelona, donde los de Izal y sus seguidores elegidos por ellos, grabaron aquel disco en formato digital que se llamó Micro Abierto. Pero de repente llegó la pandemia y todo se quedó en la tecla pause. Como Aroa y María ya no podían tocar en ningún sitio con su dúo de voces y guitarras, se dedicaron a componer. Tenían ganas de ampliar el círculo y montar una banda. El primer fichaje, como segundo guitarrista, fue Dani González, al que conocían porque iban a la misma escuela de música, Más que Guitarra. «Al acabar el confinamiento nos juntamos con él para ensayar. Pusimos un anuncio y al poco tiempo llegaron Lucas San Teodoro y Mateo Fernández, que se incorporaron como bajista y batería del grupo al que llamamos Norde porque hace referencia a nuestros orígenes», cuenta. «Norde es, además, parte del título de una obra de Álvaro Cunqueiro, y es la antigua nomenclatura gallega de la palabra Norte», añade la vocalista y compositora principal de la banda que hace indie rock. Por ahora los primeros temas son de ella y hacen los arreglos todos juntos, pero no descartan más autorías en el futuro de la formación.

Hace unos días se publicó en plataformas digitales el primer single, titulado El reflejo, un tema que pretende sensibilizar sobre el deterioro cognitivo, asunto poco habitual en las canciones que consumen los millenials. «Trata sobre las emociones, habla de los gigantes que a veces ocupan nuestras cabezas, de eliminar estigmas sobre los procesos mentales que sufren las personas a lo largo de la vida», explica Aroa, que es consciente de que sus letras no son muy corrientes, «pero he crecido escuchando a muchos cantautores y para mí siempre ha sido importante el texto, además de la melodía», justifica.

Esta semana colgarán en las plataformas digitales su segundo tema, Marea, con videoclip incluido en su canal de YouTube. «Lo pudimos hacer porque a María y a mí nos incluyeron en el mentoring de la beca Descúbreas de la Diputación de Pontevedra. Eso hizo posible la grabación en estudio con producción de Javier Abreu», agradece.

«Triunfos e ledicias»

La influencia y la importancia de Galicia en Norde (@nordemusica)queda patente en muchas más cosas que el título. «Es un posicionamiento que teníamos claro de forma que nuestras raíces estuvieran presentes en nuestro proyecto», explica añadiendo que el haber estudiado en el colegio Martín Códax de Vigo también tuvo que ver con su interés por la lengua, la literatura y la esencia gallega.

Aroa Ferreiro revela que la canción favorita de las que ha compuesto hasta ahora es una en gallego. «Es de las primeras que hice, solo la conocen los de mi grupo. Se titula Triunfos e ledicias», confiesa.

La joven comenzó a estudiar Historia del Arte, que es una de sus pasiones, «pero no me daba el tiempo para hacer todo lo que quería y me decidí por el ciclo superior de sonido, que estoy acabando en el IES audiovisual de Vigo. Quiero ser técnica de sonido y aprender todo lo que pueda sobre un sector que es mucho más amplio de lo que parece».

La compositora hizo ya algún trabajo en cortometrajes, pero quiere ampliar el campo aprendiendo también en festivales y espectáculos. Por otra parte, reconoce que le encantaría profesionalizar su banda de indie rock de la que Izal todavía no sabe nada. «No tuve más contacto con ellos después de aquella experiencia», admite.