Una merienda solidaria de mujeres

alejandro martínez VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

XOAN CARLOS GIL

Un grupo de autoayuda en las redes sociales celebra un encuentro al mes

02 may 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

Allá donde las instituciones no llegan, la sociedad civil se organiza para ayudarse mutuamente. Las redes sociales son para eso una herramienta fundamental. Y en Vigo surgen movimientos espontáneos de personas que tienen el único afán de ayudar a quien lo necesite. Porque siempre hay alguien que precisa algo de lo que otro le sobra o se quiere desprender. Y el grupo de Facebook Ayúdanos para Ayudar, Vigo y alrededores, pone en contacto esta oferta y esta demanda. Tan importante como cubrir estas necesidades es socializar y así, muchas mujeres inmigrantes, víctimas de violencia de género o de colectivos LGTBI han encontrado aquí un grupo de apoyo y nuevas amistades.

La administradora es Kawthar, una viguesa casada con un marroquí que profesa la religión musulmana. Esta semana celebraron un encuentro en la cafetería Los Sauces, ubicada en la plaza de la Industria. Aprovecharon la ocasión para llevar ropas y otros enseres donados y algunas personas que lo necesitaron se los llevaron. Valoran las donaciones recibidas últimamente por Biosbardos, Mono Vintaje o Paco Marchán. Kawthar se queja de que muchas veces las ayudas institucionales tardan en llegar. Por eso tratan de dar una respuesta inmediata. Más de 30 familias de la ciudad reciben su apoyo. Por ejemplo, a un hombre de nacionalidad peruana que sufrió un accidente con la pierna enyesada le suministraron una silla de ruedas mientras espera la de la Seguridad Social. También proporcionaron ayuda alimentaria a una madre con escasos recursos con un hijo con problemas nutricionales. Kawhtar afirma que mantendrán estos encuentros presenciales una vez al mes, coincidiendo con fines de semana o vísperas de festivos. Son reuniones multiculturales en las que las madres llevan también a sus hijos, que disfrutan a lo grande y a los que Uxía, pinta caras solidaria, maquilla. «Los niños aprenden a respetarse entre ellos. Les enseñamos que todos somos iguales y lo pasamos muy bien», afirma.