Las estrictas normas del Casco Vello de Vigo: mejor madera con termitas que aluminio o PVC
VIGO CIUDAD
El Concello ordena quitar las ventanas nuevas a unos dueños que sufrían filtraciones y les prohíbe tener persianas
04 may 2024 . Actualizado a las 05:00 h.En aras de la conservación del patrimonio arquitectónico del Casco Vello de Vigo, es preferible vivir en un piso con las ventanas infestadas de termitas por las que se cuela el agua de la lluvia, antes que sustituirlas por unas nuevas de aluminio o de PVC.
Unos propietarios hicieron este cambio y ahora el Concello les manda retirarlo todo y devolver las carpinterías exteriores a su estado anterior. A los dueños se les inundaba el piso por los daños de una plaga de termitas. Por ese motivo, decidieron poner otras ventanas modernas del mismo color que les aislaran del exterior. Sin embargo, la normativa urbanística es muy estricta. El PVC es un material prohibido en el plan urbanístico del Casco Vello para la carpintería exterior. Además, las carpinterías de madera y la puerta del portal son elementos protegidos.
Un técnico constató estas obras realizadas en el número 6 de la calle Cesteiros y la Gerencia abrió un expediente de protección de la legalidad urbanística.
El inspector comparó fotografías del antes y del después y concluyó en su informe que «pódese apreciar o grande impacto da actuación nunha das rúas máis características do Casco Vello».
Los denunciados se ofrecieron a forrar las ventanas de madera para mantener esa apariencia tradicional pero el Ayuntamiento ha rechazado esta solución porque se trata de recuperar un elemento arquitectónico protegido tal y como era. «As portas de aire, como elementos arquitectónicos expresamente protexidos na ficha desta edificación deberanse recuperar tal e como estaban», exige la arquitecta municipal en un informe por el que se desestiman las alegaciones. Se trata de un sistema de cierre por el cual las ventanas quedan al ras de la fachada. «Posiblemente sexa o elemento máis intelixente da arquitectura galega», menciona la arquitecta municipal haciendo referencia a un manual de buenas prácticas de rehabilitación de la Xunta.
Las carpinterías que había antes son las denominadas «fiestras enrasadas o fiestras al aire». «Este é un elemento tradicional da arquitectura galega presente en moitas das nosas cidades e vilas», justifica la arquitecta municipal en el informe.
Los vecinos que viven en las casas históricas del Casco Vello tampoco pueden tener persianas en sus hogares para que no se filtre la luz al interior. La administración local también ordenó a estos mismos propietarios del inmueble de la calle Cesteiros a que los retiraran. La normativa urbanística no permite persianas enrollables al exterior. Para el oscurecimiento y protección del sol, se aconseja el uso de contraventanas, estores o persianas venecianas.
La Gerencia de Urbanismo acaba de declarar que las obras ejecutadas que implicaron cambios en la fachada del edificio, consistentes en la eliminación de carpinterías protegidas de la primera planta y la sustitución por otras no permitidas en el planeamiento, así como la colocación de persianas al exterior, en un edificio con catalogación ambiental «non son legalizables». Por tal motivo, ordena la reposición de la carpintería inicial y eliminar las persianas, para lo que deberán solicitar una licencia de obra menor en edificios catalogados.
La administración local les da tres meses de plazo para cumplir esta orden. «En caso de incumprimento, procederase por esta administración á execución forzosa da citada demolición, ben mediante execución subsidiaria por conta do interesado, ben mediante a imposición de multas coercitivas de 1.000 a 10.000 reiterables mensualmente ata lograr a execución», explican en la resolución del expediente de reposición de la legalidad.