Un exeditor de medios testifica que utilizó su diario para favorecer a Trump en la campaña del 2016

La Voz REDACCIÓN

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David Pecker, durante su testimonio en el juicio contra Trump.
David Pecker, durante su testimonio en el juicio contra Trump. Jane Rosenberg | REUTERS

David Pecker confiesa que compró los derechos de publicación de  historias extramaritales del entonces candidato republicano para dejarlas guardadas en un cajón

23 abr 2024 . Actualizado a las 21:59 h.

Un testigo clave en el juicio penal contra Donald Trump aportó este martes pruebas sobre lo que los fiscales consideran fue una «conspiración criminal» para influir en las elecciones presidenciales del 2016. Se trata del David Pecker, entonces editor del tabloide National Enquirer, medio que puso al servicio de Trump. 

El expresidente, presente en la sala, está acusado de falsificación de registros contables para comprar el silencio de la actriz porno Stormy Daniels y que no saliera a la luz una supuesta aventura amorosa entre ambos que habría puesto en jaque su ascenso a la Casa Blanca hace ahora ocho años.

A la trama, de acuerdo con la Fiscalía de Manhattan, contribuyó la labor de Pecker comprando los derechos de publicación de otras dos historias extramaritales —un presunto affaire con la modelo Karen McDougal y un falso hijo ilegítimo de Trump— para dejarlas guardadas en un cajón y proteger así la candidatura del republicano. Una estrategia conocida en inglés como catch and kill (atrapar y matar), que aplicó tras abonar 150.000 dólares a McDougal y 30.000 a Dino Sajudin (entonces portero de la Torre Trump) que aseveraba tener la exclusiva del supuesto vástago no reconocido de Trump. 

«Tomé la decisión de comprar la historia [del presunto hijo ilegítimo)] debido a la posible vergüenza que supondría para la campaña y para el señor Trump», aclaró. 

Contra rivales políticos

Poco antes, Pecker había explicado que también perjudicaron a rivales políticos del exgobernante. «Lo que yo debía hacer era publicar historias positivas sobre el señor Trump y publicar historias negativas sobre sus oponentes», confirmó con actitud calmada Pecker, el primer testigo en declarar en el juicio, quien fue llamado por la Fiscalía tras terminar los alegatos iniciales.

Los fiscales argumentaron el lunes que esta «conspiración», en la que mediaba Michael Cohen, antiguo abogado del otrora presidente, fraguó con una reunión en la Torre Trump en el 2015.

Según Pecker, Trump era por entonces «el soltero más codiciado y salía con las mujeres más bellas», por lo que el exmandatario pidió a Cohen que agendara un encuentro a tres bandas para articular la trama.

«Recibí una llamada de Michael Cohen diciéndome que el jefe quería verme (...) Pensé que ayudaría a su campaña, pero que yo también me beneficiaría», añadió Pecker. El directivo de medios reconoció que, además, sacó historias amarillistas para lastrar las aspiraciones de dos rivales conservadores de Trump: Marco Rubio y Ted Cruz.

Asimismo, dijo que usó la influencia de The National Enquirer para denigrar la imagen de la entonces candidata demócrata, Hillary Clinton: «Yo sacaba a Hillary como facilitadora de casos en los que Bill Clinton quedaba como un mujeriego», concretó.

La Fiscalía procedió entonces a preguntarle por titulares concretos de The National Enquirer acerca de estos perfiles políticos, lo que provocó que, casi por primera vez en toda la mañana, Trump cambiara su postura impasible y se acercara a la pantalla donde se proyectaban los titulares.

Finalmente, Pecker también desveló que el exmandatario le presentó en el 2016 a su exasesor Steve Bannon,condenado en e  2022 por desacato al Congreso cuando se juzgaba su vinculación con el asalto al Capitolio, porque consideraba que podían «trabajar muy bien juntos».