Las protestas estudiantiles propalestinas inflaman los campus universitarios en Estados Unidos

Miguel Palacio NUEVA YORK / E. LA VOZ

INTERNACIONAL

Estudiantes de la Universidad de Columbia, ayer, manifestándose en contra de la financiación estadounidense a Israel.
Estudiantes de la Universidad de Columbia, ayer, manifestándose en contra de la financiación estadounidense a Israel. Europa Press / Contacto / Derek Fren | EUROPAPRESS

La semana pasada, la presidenta de Columbia, Minouche Shafik, pidió a la policía que desalojase una protesta «disruptiva»

23 abr 2024 . Actualizado a las 21:51 h.

Como el fuego por un reguero de gasolina, las protestas universitarias se extienden por EE.UU. por segunda semana consecutiva. La chispa, en este caso, ha sido el desalojo de una acampada protesta en la Universidad de Columbia por la situación en Gaza, que el jueves se saldó con más de un centenar de detenidos.

Los arrestos de la semana pasada se produjeron después de que la presidenta de Columbia, Minouche Shafik, pidiese a la policía de Nueva York que desalojase una protesta que calificaba de «disruptiva». Los manifestantes criticaban, además del apoyo de Washington a Tel Aviv en su ofensiva en Gaza, una intervención de Shafik ante el Congreso el miércoles pasado en la que, según su criterio, se mostró demasiado tibia.

Desde los ataques de Hamás contra Israel en octubre, los campus estadounidenses han sido escenario de un enconado enfrentamiento entre los partidarios de Israel y los de Palestina. Un conflicto que se ha terminado convirtiendo en un debate sobre los límites de la libertad de expresión. De un lado, asociaciones y grupos judíos denuncian que las protestas a favor de Palestina, y de un alto el fuego en Gaza, han ido frecuentemente acompañadas de comportamientos y actitudes antisemitas. Del otro, una parte importante de la comunidad estudiantil mira con preocupación cómo su Gobierno apoya una dura intervención militar israelí en Gaza con la que no están de acuerdo. Por ello, piden a sus alma mater que corten la colaboración con universidades israelíes y que renuncien a la financiación de empresas con intereses en el conflicto.

Así, fueron los más de cien detenidos el viernes —a raíz de la decisión de Shafik de pedir la intervención de la policía de Nueva York— los que motivaron el domingo a una nueva oleada de manifestantes a volver a acampar en los terrenos de Columbia, esta vez en mayores números. Además, la gestión de las autoridades policiales y universitarias de las protestas en el centro neoyorquino era recibida con manifestaciones en otros campus del país. El lunes docenas de manifestantes terminaron esposados en los recintos universitarios de Yale y la Universidad de Nueva York (NYU), y campamentos protesta improvisados se levantaban en otros campus como el de Berkeley en California, el de Chapel Hill en la Universidad de Carolina del Norte, o el de la Universidad de Minnesota.

Por si fuera poco, el debate se ha extendido también a Washington, desde donde los diez legisladores republicanos del estado de Nueva York enviaban el lunes una carta dirigida a la Universidad de Columbia en la que afirmaban que la anarquía había «engullido el campus».